Noviembre 2015: Mishigodos, Pankrrak y Cumbre Climática
CRÓNICAS POÉTICAS DEL TERCER MILENIO
Noviembre 2015 – Por José Muchnik
Muestrario de hechos verídicos, otra mirada sobre los tiempos presentes para los habitantes del futuro
Paris noviembre rojo: Mishigodos, Pankrrak y Cumbre Climática
“…La humanidad se viene encima. Ya no podemos, hermano loco buscar a Dios por las esquinas…”
Extraído del tango “A un semejante”,
Letra y música de Eladia Blázquez
Es la sensación que tuve ese 13 de noviembre 2015 en París, a las 21h30 la noche se tiñó de sangre ¿Dónde encontrar un retazo de humanidad? En enero habían atacado el diario Charlie Hebdo y un supermercado Kasher, asesinar judíos o periodistas nada original, Historia ya conoce algo, ahora atacaban la ciudad hereje, el centro de la perversión, vino perfumes minifaldas ateos marihuana… Concierto de rock, mil personas en el Bataclán, al grito de Allahu Akbar[1] descargaban las kalachnikov, noventa muertos, trescientos heridos, caídos de todos colores razas creencias profesiones, estudiantes fleteros dibujantes profesores de yoga de música de dibujo… terminada la santa misión accionaron las cinturas de explosivos, transformados en mártires ya podían acceder al paraíso… Fue el epicentro de ese fatal 13 de noviembre, a pocas cuadras de ahí ametrallaban al voleo clientes sentados en terrazas de bares, tomando una cervecita, picando algo, disfrutando de la vida… hicieron cuarenta muertos entre La Belle Equipe, el Carillon, la pizzería Casa Nostra y el restaurant Le Petit Cambodge. La humanidad se viene encima, difícil entender… Algunos prefieren ver la historia como un gran complot, como si alguien manejara los piolines a voluntad, lamentablemente no es así, cierto el “gran hermano” pensó que iban a “fabricar democracias” a pedido, en Afganistán, Irak, Libia, Siria… ahora ya es tarde, se les fue de control, la locura humana existe, se salió de cauce como aluvión de lodo. No sé si la humanidad se viene encima o todavía no ha comenzado, parecería que aún no salimos de las tinieblas, preferiría esta última versión, la proliferación de “Mishigodos” indicaría que aún no accedimos a la humanización de nuestra especie. Tratamos de ser humanos desde los orígenes del tiempo, repitiendo crímenes y espejos ¿Buscar en el centro del silencio? ¿Hallar tal vez otros acentos? ¿Mishigodos? ¿Qué significa? Ya lo explicamos en el N°91 de este mismo diario (noviembre 2009), los que cometen locuras en nombre de Dios[2] constituyen una plaga universal, atraviesan épocas, fronteras y religiones.
De todos modos inútil inventar palabras para tratar de pronunciar el mundo, inútil disfrazarse de poeta, nadie escucha. Pankrrak, Pankrrak… si alguna vez lo escucharon ya se olvidaron (ver N° 83 de este diario[3]) Por eso estas crónicas no están dirigidas a mis contemporáneos, su capacidad de escucha fue saturada por una avalancha de multimedios que bloquea sentidos. París estaba al rojo vivo, no sólo por la sangre aún tibia del 13 de noviembre, dos semanas después comenzaba la llamada COP21, la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático. Los principales dirigentes del planeta Tierra se reunían durante diez días, la cosa era seria, ya no se trataba de lanzar alertas, los desastres ya no eran hipótesis de laboratorio, ahí estaban a la luz del día; haciendo sus estragos. Las casualidades nunca son casuales, el mismo día que comenzaba en París la conferencia cumbre, el norte de China, Pekín incluido, amaneció bajo una sofocante capa de polución, noche diurna, los poetas afilaron sus metáforas, las autoridades decretaron el nivel de alerta naranja, suspendieron el tráfico en autopista, los trabajos en obras públicas… la densidad de partículas peligrosas era 20 veces la admitida por la OMS (Organización mundial de la salud)
El futuro del planeta estaba en juego; tal vez ya estaba jugado, tal vez habían cargado demasiado las espaldas de la Pachamama y ya era tarde, Tierra comenzaba a rebelarse, islas corrían riesgo de ser tragadas por el mar, populosas ciudades arrasadas por inundaciones, sequías castigando sin piedad, arrojando a los caminos desplazados climáticos…Las emisiones de CO2 habían llegado a diez mil millones de toneladas por año en 2014 (diez veces más que en los años cincuenta). Habría que limitar el alza de temperatura a 2°C para disminuir la intensidad y frecuencia de los fenómenos climático, reducir a la mitad el uso de carbón, petróleo y gas natural antes del 2.050. En París los dirigentes del planeta se mostraron optimistas. Disculpen que confiese mis dudas, soy más escéptico, me da la sensación que todo forma parte de todo, que crisis climática, económica, terrorismo… no sé bien cómo… pero en algún lugar están relacionados. Corrimos durante años hacia un progreso que resultó ser espejismo ¿y ahora qué? Disculpen pero alguien tiene que decirlo: estamos mal, disfruten, estaremos peor. No, no soy apocalíptico, pero así aprendemos, a golpes… Será difícil que cambiemos por las buenas, seguimos quemando selvas, ensuciando mares y ríos, contaminando aire y futuro, embotellando autopistas y pulmones, corriendo carreras sin sentido, sin saber porqué corremos ni dónde está la línea de llegada.
Para terminar, dos noticias marginales que también forman parte del todo, de este mundo en vías de humanización, o de lo contrario.
Primera: En Hong Kong, unos días antes de los atentados en París, encontraron una mujer muerta en el Mac Donald’s de Ping Shek, barrio de trabajadores. La infortunada noticia reveló a este cronista que en estos comienzos del tercer milenio además de los refugiados climáticos, de guerra, políticos… existían los “McRefugees”, gente que elige un restaurant de esa cadena para pasar la noche en seguridad, al abrigo de las inclemencias del tiempo. Durante horas, la gente seguía entrando al MacDonald’s hacía su pedido, comía sus hamburguesas, nadie reparaba en esa mujer, entre 50 y 60 años, durmiendo en una banqueta, a las 8h30 de la mañana siguiente alguien alertó a la policía, no estaba durmiendo, estaba muerta. Revisando las cámaras de seguridad, constataron que el deceso se había producido a las 1h20’ de la madrugada. Los “McRefugees” suelen dormir en los locales de esta cadena norteamericana, en Hong Kong 120 de los 253 Mac Donald’s operan las veinticuatro horas del día. Según una nota del New York Post, el fenómeno se da también en Japón y China continental, pero parece ser más popular en Hong Kong, uno de los lugares más costosos para vivir del planeta. El servicio social de esta ex colonia británica manifestó: “Se trata de un problema social complejo”.
Segunda: Japón decidió retomar a partir de marzo 2016 la pesca de la ballena en el océano Antártico, algunos lo acusan de maquillar como pesca científica una actividad comercial. Siempre hay mal pensados.
Mientras tanto los Mishigodos cada vez más locos y el Pankrrak deviene audible.
[1] Dios es el más grande.
[2] Mishigodos: de Mishuguene o mishiguene, loco en iddysh y God, Dios en inglés
[3] Pankrrak: sonido inaudible que trasmite la fragmentación del mundo en los comienzos del tercer milenio. Ver “SEFIKILL: palabras para el nuevo milenio”. Editorial CICCUS, 2014, Argentina.